Hoy hemos llegado al colegio puntuales para empezar las clases a las 8h00. Justo antes hemos comentado que la adaptación en las familias ha sido muy buena y que nos encontramos todos muy a gusto. La mañana ha sido realmente dura, con 4 horas de clase y un recreo de 20 minutos entre medias. La mitad hemos estado en el aula de español, trabajando el oral con los alumnos franceses (nos hemos presentado 4 veces…) y el resto han ido a todo tipo de asignaturas: inglés con examen, historia, física, mates, francés con dictado… y en general hemos entendido bastante y no es broma!!!
La última hora confesamos que algunos, ante el rugido de nuestros estómagos, hemos decidido emplearla practicando nuestro francés en una maravillosa pastelería. He aquí a los culpables: Angel relamiéndose con una cookie gigante y las chicas compartiendo un buen trozo de pizza.
Pero por fin ha llegado la hora de comer para todos, las 12h00, y nos hemos dirigido a «la cantine». Aquí tenéis el menú y hoy había, sí, habéis leído bien, PAELLA. Eso sí, nos vamos a ahorrar los comentarios sobre la misma…
Para que os hagáis una idea, aquí tenéis varias fotos: haciendo cola, transportando las bandejas y … comiendo?? Los platos de paella no bajan mucho, como véis!
Pensáis que hemos terminado la jornada lectiva? Pues no, aún seguimos con tres horas más. Por suerte dos de ellas son de taller de teatro en el que participamos activamente. Primero unos ejercicios de concentración…
Luego participamos en ejercicios de improvisación…
Y el gran premio, sin duda, es para MUERTE EN LAS REBAJAS!!! No os perdáis a las «ambulancieras»…
Despliegue de medios, con volante = tapa de basura!!! Para terminar, los alumnos franceses nos muestran un ensayo de la obra que están preparando, con un principio muy impactante…
Pero estamos agotados y el timbre de las 16h30, hora de ir a casa, es una bendición.
A demain, alors!!!